martes, 3 de julio de 2012

Tarde de Invierno






Tercamente una tarde de invierno se posó y se perdió 
en mis dedos...no perdonó espacio ni tiempo.




La tarde se ahoga al cruzar los brazos
evitando las caracolas de su vestido
enraizando los cabellos de ceniza
que envuelven cada fracción del cielo
del caído invierno.


La tarde se ahoga al cruzarse de brazos
revolviendo bosques de algarrobo
en el murmullo de cada una de las hojas
de pozos de espejos, de pestañas dormidas,
de anillos de aire sin ganas, sin luz.


La tarde se ahoga al cruzarse de brazos
eclipsando su sonrisa
en cortinas rasgadas por su frío aliento
penumbrando huéspedes de ausentes márgenes
con lenguas presentes y relojes sin tiempo.


La tarde se ahoga al cruzarse de brazos
y yo me encuentro descolgada en un pedazo de fierro
tiritando y recordando a Breton
tocando nuevamente sus labios cerrados
aprovechando las pequeñas pastillas que encontré en sus manos
para este frío invierno.  

1 comentario:

Mel dijo...

Gustó. que bueno poder leer tu poesía, digo por lo menos por acá.
ya habrá tiempo para reunirnos en un mismo tiempo y espacio y compartir lo mas intimo de nuestras almas reflejadas claro está en la poesía.