lunes, 28 de marzo de 2011

Reírse



Tu risa se aparece a un árbol entreabierto como si sus ramitas fueran horizontes abiertos
y ahí no hubieran respuestas ni perdón ni llevaras nada a cuestas ni una mancha de óxido ni desvelo.
Sólo tu risa formara un aire desatado de campanas con nombre de naturaleza
y claveles con barbas de caballo que cabalgan dando círculos alrededor tuyo.
Es cuando tu frente cruza ésas sombras que te acechan entonces sabes que una boca cerrada contestará un canto, que el árbol entreabierto deshojará lluvias de plumas y te caerá una de ellas en la panza y te hará cosquillas; comenzarás a reír a no esperar cuando esperabas a querer cuando no querías  a soñar cuando no lo hacías y es porque entenderás que siempre es mejor estirar la boca y engordar los pómulos como dos bolitas de algodones, y sabrás que es mejor reír, reír a carcajadas.

domingo, 27 de marzo de 2011

¡Sus rinconcitos!


Cuantas veces caminamos sin ver
sintiendo sólo que la vida nos acosa
y los ojos apenas adivinan los poderes del aire
 convirtiendo en salones cenicientos a nuestras pupilas
los cuales no logran observar  esos rinconcitos
donde corren la sangre del alma
de un lugar, de sus raíces, de su furia,
de sus huesos, de su pan.


Y no logramos descifrar que
así como nosotros tenemos un rinconcito
donde se anidan cada uno de nuestros sueños,
también la naturaleza tiene uno,
donde derrriba el invierno ardiendo sus frutos
 y desbordando su misteriosa existencia de vivir en silencio
que nosotros deberíamos poner más atención en mirar
-con el respeto debido-
 en su habitad ceremonial
donde como una luna florida ellos
 -sin colocar su celeste cerrojo-
 te muestran su delicia y dulzura.


Eso hoy en este post algo de ello te quiero demostrar. Así que a OBSERVAR  más los rinconcitos que ellos también te quieren brindar, donde un poema se logra imantar convertiéndola en poesía pura.

"...Y ya no volarán nunca las dos golondrinas de tus cejas
el viento mueve las velas como flores
yo sé que tu estás esperándome detrás de la lluvia
y eres más que tu delantal y tu libro de letras
eres una sorpresa perenne
dentro de la rosa del día".


"Las piedras no ofenden;nada
codician. Tan sólo piden
amor a todos, y piden
amor aún a la Nada.
Y si algunas de ellas se
van cabizbajas, o van
avergonzadas es que
algo de humano harán..."




"Tus dedos si que sabía peinarse como nadie lo hizo
mejor que los peluqueros de los transatlánticos
ah y tus sonrisas maravillosas sombrillas para el calor
tú que llevas prendido un cine para la mejilla
junto a ti mi deseo es un niño de leche".
Cuando tú me decías
la vida es derecha como un papel de cartas 
Y yo regaba la rosa de tu cabellera sobre tus hombros
por eso y por la magnolia de tu canto 
qué pena
la lluvia cae desigual como tu nombre".




"¡No puedes salir del jardín donde mi amor te ha encerrado!
Presa estás en mí.
Aunque rompas el vaso,
seguirá inmóvil la columna perfecta del agua
aunque no quieras siempre lucirás
esa corona de invisible rocío
que llevan todas las mujeres que un poeta amó..."



"Crece o muere el día, crece
o muere la luz, crece
y nunca muere la esperanza.
El amor es siempre el día que vendrá".


-¡Ay!-pensé-¡cuántas veces el genio
Así duerme en el fondo del alma
Y una voz como Lázaro, espera
Que le diga: "¡Levántate y anda".


"Por las montañas vas como viene la brisa
o la corriente brusca que baja la nieve
o bien tu cabellera palpitante confirma
los altos ornamentos del sol en la espesura".




"¿Quién eres tú? !Qué importa! 
A pesar de ti misma, 
hay en tus ojos una breve palabra 
enigmática. 
No quiero saberla. Me gustas 
mirándome de lado, escondida, asustada. 
Así puedo pensar que huyes de algo, 
de mí o de ti, de nada, 
de esas tentaciones que dicen que persiguen 
a la mujer casada".





"Quizá en la muerte para siempre seremos, 
cuando el polvo sea polvo, 
esa indescifrable raíz, 
de la cual para siempre crecerá, 
ecuánime o atroz, 
nuestro solitario cielo o infierno".





"Despierta, tiemblo al mirarte;
Dormida, me atrevo a verte;
Por eso, alma de mi alma, 
Yo velo mientras tú duermes.
Despierta, ríes y, al reír, tus labios
Inquietos me parecen
Relámpagos de grana que serpean
Sobre un cielo de nieve."




"Mi padre duerme. Su semblante augusto
figura un apacible corazón;
está ahora tan dulce...
si hay algo en él de amargo, seré yo.
(...)
Hay soledad en el hogar sin bulla,
sin noticias, sin verde, sin niñez.
Y si hay algo quebrado en esta tarde,
y que baja viejos caminos blancos curvos.
Por ellos va mi corazón a pie".




"Hay tardes 
que tienen golondrinas rojas
sobre el mar,
y tardes en que aves ojerosas
picotean colgajos de tardes
que creíamos que jamás iban a morir".




"En tu ventana 
cuelgan enredaderas de los volantes de los automóviles
y los expendedores disminuyen el precio de sus mercancías
déjame que bese tu voz
tu voz
que canta en todas las ramas de la mañana".






"Las calles están desiertas 
y en los fondos se adivinan, 
corazones andaluces 
buscando viejas espinas. 

¡Niñas, 
corred las cortinas!".





"No te amo como si fueras rosa de sal, topacio
o flecha de claveles que propagan fuego:
te amo como se aman ciertas cosas oscuras,
secretamente,entre la sombra y el alma.
Te amo como la planta que no florece y lleva 
dentro de si, escondida, la luz de aquellas flores,
y gracias a tu amor vive oscuro en mi cuerpo
el apretado aroma que ascendió de la tierra".





"He dormido todo
un año,
o tal vez he muerto
sólo un tiempo,
no lo sé.
Pero sé que un año
he estado ausente,
sé que un año he
descansado,
sé que en ese tiempo
las moras y las frutas
secaban sus raíces
triturándolas
de sabor y regocijo.
Yo descansé
en la sierra,
y felizmente mi
corazón no se secó".



Fotos: Mus Araña


¡¡¡ POR ESTO Y MÁS AMO LA NATURALEZA !!!

viernes, 18 de marzo de 2011

Retorno


Sales a mi encuentro
al borde de sepulcros removidos
con más brazos que piernas
con más piernas que brazos
abrigando una vida difusa
llena de cascos de goma

Me conduces a la escena
burlándote de cada uno de los puntos
que están en mis pañuelos
porque tú sabes que son mantequilla derretida
en mi plato...¡Y nada más!

Y tomamos el café de tarde
muriendo de gusto
Silbando membrana por membrana
aprendiendo a irse cuando debe de irse
de círculos que matan risas,
que ya no alcanzan a ocupar ahora el mismo tiempo.

Hay puntos altos que hemos empezado
sustancias que han abierto sus brazos
y abrazado una bolsa en forma de haba
Y he vuelto a decir:
¡Está lloviendo, afuera está lloviendo!
trayéndo consigo unas trenzas azul que
se ubican en mis pies y manos
¡Sé que es eso, sé que significa!,
es la ecuación del amor que ha llegado de nuevo,
una ecuación que estoy resolviendo junto conmigo.


A la conversación de hoy en medio de tanta gente, de comida medianamente apetecible, de espacios chicos, de ruidos fuertes  pero con palabras claras, exactas y necesarias...¡Gracias!

miércoles, 16 de marzo de 2011

...

                                                                    ¡Así!





Hay tiempos en que el romanticismo se desvanece y cae en una atmósfera de voces apagadas. No tienes ganas de soñar con elefantes con ojos de flor cuando miras las nubes en la mañana. Ni taradear sinfonías en tu cabeza para atraer pensamientos que te permiten huir con hertz . Es cómo si la fecha de caducidad hubiera aparecido repentinamente y como figurita brillante te hincara los ojos y vieras las cosas con calma sin las encrespadas "te veré". Como si la página del libro de letras dónde habías escrito el androginismo se hubiera arrancado. Y un sólo cuerpo se ubica en su espalda, tan pesado que es ahí donde el amor yace.

Sin embargo aún cree que existe.

lunes, 14 de marzo de 2011

Bi



Ariana perpetua de luz y de hielos profundos. Sube por escalas de madreselvas, de espaldas de arena y una ola de silencio esperando estaciones de un minuto-quizás dos-a minuto. Allí donde duermen trenes con vagones repletos de desatada altura, de desatada pequeñez donde paredes y manos no aseguran nada.
Una risa se derrocha en el árbol de la vida como el viento que le ciega los dos ojos de escarlata de Ariana. Y también una boca de paréntesis cabizbajo se evidencia de pronto como la lluvia que moja sus mejillas de naranja, un cambio tan brusco de emociones como el mar abrazando a la tierra.
Los dientes de la literatura la disipan de dos: la risa y la boca de paréntesis ¡es lo único! como si un marinero con piernas largas y  de traje silvestre se aventara a una lluvia loca.
Hay sonidos que traen trajes de nariz para recordarle olores de rocíos y de entierros en una catedral. Hay otros que desembocan en pupilas saltarinas como el trigo vacilante en la taza de café de Ariana.
No bastan zapatos ni noches de raíces convertidas en amapolas, sino peludos medicamentos de anteojos que ingresan a la bolsa de alimentos para evitar que ella suba en escalas de madreselvas logrando que un hermoso pájaro muestre la luz y se pose en el muérdago de su cabeza , y así dejar de insistir inconscientemente que ya no son dos sino ella, la que hoy Ariana no encuentra la voz, y una de ellas duerma para que no cambie de un minuto-quizás dos- de una risa a una boca de paréntesis, y viceversa.

miércoles, 9 de marzo de 2011

Ξ̲̲̅̅aΞ̲̲̅̅rΞ̲̲̅̅cΞ̲̲̅̅oΞ̲̲̅̅ Ξ̲̲̅̅iΞ̲̲̅̅rΞ̲̲̅̅iΞ̲̅̅sΞ̲̲̅̅


"Me escribes un poema que aprieta el alma tan fuerte que deja caer unas pequeñitas lágrimas en mis mejillas y sabes que te miraré, sonreiré, me acercaré a tu oído lleno de minutos y estrellas azules y te diré: ¡Me gusta tu sonrisa de arcoiris!. Tú con tus ojos metafísicos me regalaras tu luciérnaga de pueblo montevideano y ambos comenzaremos a hablar de patafísica como aquellas noches de tiempos de palomas.Y me subiré a tu bicicleta de timbre azulino. Y guardaré el número 9 que colocaste en el tablerito de mi pared .Y te cogeré sin manos. Y te miraré sin ojos. Y a pesar de que afuera está la lluvia de ojerosas puertas, saldremos para decir no lo sé con certeza pero vengo"

martes, 8 de marzo de 2011

Equidistantes




El acecho de una noche colgada del palacio de azúcar que rodea el canto descubierto debajo de una almohada en la cama llena de flechas, y arriba una persiana de dos rendijas semi abiertas que guiñan los ojos cuando sube la mirada para ver más allá de las nubes amorfas. Hay oleajes que lamen la barba mientras están tiradas en el tejado y otras pellizcan palomas que ríen de sus penas. Los fluctuantes vientos que azotaban su rostro cuando encontraba un muerto en medio de su cabeza y otro, por momentos, tan hermoso como un cielo bajo una paloma.
Un norte y un sur de húmedos y sonámbulos pañuelos que creaban dos personas y nacían en un corazón, sólo un corazón para dos direcciones que crecían y pesaban como campanadas de los días domingos. Ambos se habían prendido con las uñas en la parte más íntima de una mujer con un paraguas escondido en el bolsillo, aferrados a una edad, a una temporada en el que habían arrancado palabras de una garganta de canciones escondidas. El primero con ojos de aeródromo, alzaba sus manos de eclipse cuando ambos se veían aplacando las grietas de un horizonte mudo, desmemoriado y medroso, levantando la tristeza de sus sábanas que los cobijaban en cada noche en que oscilaba la flor de sus recuerdos. El segundo de pensamientos nuevos emergían huellas sin cálculo e inquietud  que estiraban el silencio hasta desaparecerlo y que no era ajeno a la docena de suspiros que en mucha de sus extremidades ella había ofrecido y, que por momentos casi perpetuos, permitían que de sus pies palomas se desprendieran para regresarla al hoy del tiempo. Son dos vientos equidistantes que cerraban puertas y no dejaban al adversario adentro cuando un espejo de colores desunidos y sienes azoradas se hacían añicos en una mujer con un paraguas escondido en su bolsillo.



jueves, 3 de marzo de 2011

Mirando por la ventana

 "Hay algo que espero frente a mi ventana, algo que espero en la noche estrellada. 
No es la muerte porque de la muerte no espero nada. 
No es el amor, porque el amor me lo ha dado todo.
 Es algo que está entre el amor y la muerte..."
                                               Óscar Hahn





Espuma en los árboles de larga cabellera
que duermen parados a las orillas de la pista
Luces rojas y verdes
como la manzana que dejó tirada aquel niño
que ahora se pierde,
se pierde en mi almohada
El carro blanco con sus bailes de tango
pasa al costado de una chica sin paraguas de lluvia
indiferente a melodías de amar.
Los edificios, ciempiés de largas patas
que se pierden en encuentros diplomáticos
de todos los días
Las pistas afelpadas
llevan en cada poro de su piel
corazones indiferentes, llorados, amados, soñados
mientras los micros con sus dedos las acarician a diario
El viento desde acá parece el cuerpo de un sapito
que salta en mi cara, saca la lengua y me acaricia
y yo me quedo pegada en su engomada lengua.
El cielo es un tótem
donde cuelgo exclamaciones e interrogaciones
lavadas y planchadas
pero no guardadas en el rincón de mi alma,
ya que se encuentran aún
sin manos en mi cintura.
Los ruidos a ésta hora
aflojan su espalda, estiran sus piernas
y susurran tan potentes en mi oído
como el ladrido de un perro dejado en la puerta de afuera.
Al mirar nuevamente por mi ventana
espero que no encuentre almanaques de otro tiempo
sino que mis ojos como árboles
puedan descifrar las tablas de multiplicar
impregnadas en mi cabeza....
Todo eso sucede cuando miras
de manera confidencial
por la ventana.

miércoles, 2 de marzo de 2011

Verano




 Al final, te estaré esperando
allí donde acaba este trago amargo;
al final, te estaré esperando
y me dirás si me he perdido algo.
Y hablaremos del cielo y del barro,
 y nos cabrá todo el mundo en una mano.
 Y al final yo estaré esperando.

                                                
                                 Sonaba mientras escribía
                                       




En Verano los luceros son lindos pañuelitos que empapan el corazón
que exhuman firmamentos de enlutadas catedrales.
No caben poemas rotos,
no hay celdas con rincones de tarde azul desteñida.
No hay desfiladero de heridas
ni las ganas de olvidar lo que no se olvida.


En Verano la vida parece un espejismo
que hace un círculo alrededor del sol y ahí,
ahí las calles son algodones y caen de los árboles lirios azules,
los pájaros no tienen alas y los puedes tocar
sintiéndolos como si plancharas aureolas, y el viento,
el viento abre su boca te come y te sientes como en una montaña rusa infinita
con profundidades de rosas y subidas de sueños sin cristal,
de trompetas que retumban en tus oídos sin parar.


En Verano apuntas con los dedos sólo a los ojos,
no escondemos miradas bajo viejos estatuarios,
tú sólo afinas tu alma como la cuerda de una guitarra
y empiezas a tocar
y empiezas a cantar
¡A cantar!


En Verano tu ríes cuando abrazas la ciudad en su espalda
y empiezan a girar juntos las agujas del reloj
sin vidas despegadas de "tu realidad"
sin figuritas brillantes que pinchan como agujas;
dejándo de ser sólo cometas que pasan sin iluminar sin marcar presencia
que sólo vienen y van.
En Verano somos estrellas que permanecen
que vienen y no se van porque dejas luz, calor, vida y perpetuidad


En Verano inicias un nuevo año,
de nacer y haber vivido y no sólo apenas haber existido.
Verano, es la mejor temporada para jugar al ajedrez
en el tablero de tu mano y ganar
¡Ganar! ¡Ganar! ¡Ganar!
Verano, me dijo, es la mejor temporada
para volverte a ilusionar.